+ + google.com, pub-1274458394868065, DIRECT, f08c47fec0942fa0

Lunes 29 de Diciembre de 2025

Hoy es Lunes 29 de Diciembre de 2025 y son las 15:59 -

29/12/2025

Las mejores estrategias para recuperar el hábito de la lectura en 2026

Fuente: telam

Algunas personas obtienen mejores resultados explorando formatos digitales y compartiendo la experiencia en clubes silenciosos

>El informe internacional destaca que Argentina figura entre los 15 países con menor promedio de libros leídos por persona al año según La mayoría de los adolescentes leen por obligación escolar, mientras que la continuidad del hábito en la adultez se diluye, según la Encuesta Nacional de Consumos Culturales.

En este contexto, especialistas y entidades educativas advierten sobre el impacto de la baja en la lectura, e insisten en los beneficios que aporta el hábito lector. Según Universidad de Artes, Ciencias y Comunicación (UNIACC), la lectura resulta clave para expandir el conocimiento, desarrollar la imaginación y comprender el entorno.

En el ámbito universitario, los libros constituyen una fuente inagotable de información y una herramienta indispensable para el crecimiento académico y personal.

Esta capacidad resulta fundamental tanto para el éxito académico como para la vida profesional, ya que permite comprender en profundidad los temas de estudio y cuestionar ideas establecidas.

La lectura fomenta la creatividad y la imaginación, atributos valorados en la educación superior y en el mundo laboral. Al sumergirse en historias y mundos diversos, los lectores pueden explorar nuevas ideas y expandir sus horizontes mentales.

Además, abordar obras que tratan temas como justicia social, igualdad de género y diversidad cultural sensibiliza a los estudiantes y los motiva a involucrarse como agentes de cambio.

Las estrategias para recuperar el hábito lector se multiplican ante el escenario de retroceso. Elegir libros que se ajusten a las preferencias personales constituye un primer paso. Se sugiere evitar obras demasiado densas y optar por títulos que resulten atractivos desde las primeras páginas. Consultar a amistades, libreros, comunidades digitales o recurrir a servicios de recomendación puede aportar variedad y renovar el interés.

Además, limitar el uso de dispositivos electrónicos durante ese intervalo contribuye a la concentración. Asimismo, el acceso a libros digitales, audiolibros o aplicaciones facilita la lectura adaptándose a distintos estilos de vida.

La socialización en torno a la lectura representa otra vía para estimular el interés por los libros. También, participar en desafíos o metas anuales, propuestos por instituciones culturales, brinda motivación adicional a quienes buscan retomar el contacto con la literatura.

El entorno digital también ofrece recursos novedosos. Plataformas que permitan registrar avances y recibir recomendaciones personalizadas, mientras que explorar listas de libros en redes sociales puede incentivar el intercambio del tiempo de pantalla por la lectura.

Abandonar un libro que no genera interés y cambiar de título resulta clave para mantener el entusiasmo. La lectura debe ser una fuente de placer y no una obligación. Entre los beneficios reportados por quienes logran reinstalar el hábito, se cuentan la reducción del estrés y el estímulo constante de la curiosidad intelectual. Los libros abren la puerta a historias y perspectivas que enriquecen la vida cotidiana y fortalecen la confianza personal.

La lectura, además de sus ventajas individuales, contribuye al desarrollo cultural y al compromiso social. Quienes cultivan este hábito tienden a estar mejor preparados para participar de la vida cívica y aportar a sus comunidades.

Fuente: telam

Compartir